Image and video hosting by TinyPic

El día que todo cambió ~ Capítulo 8

El día que todo cambió ♥  
Yo ya sabía bien que me había perdido definitivamente desde que conocí la sensación de tener a Johnny cerca de mí.
_ Jacob - dije nerviosa, viendo a Johnny por la vidriera del café que se encontraba detrás de él.
_ Cómo has estado? Estos últimos dos días no me has llamado.
_ No, disculpa, es que he estado muy ocupada.
_ Ah, entiendo. Cele, ya no puedo más con ésto, yo no sé qué pasará contigo, pero te necesito - dijo ésto tomándome por sorpresa y apoyando sus labios precipitada y violentamente sobre los míos. Rápidamente me aparté de él y me metí al café sin decir palabra alguna. Pude ver a Johnny bajar su mirada evitándome el saludo.
_ Tarde - dijo Alberto señalándome el reloj de pared que se encontraba frente a él.
Fastidiada por lo acabado de suceder con Jacob, el ser evitada por Johnny sin saber aún por qué y la recriminación de Alberto junto a su querida hija caminé rápidamente hacia la parte trasera para comenzar con el trabajo. Al salir Johnny ya no estaba allí. De repente todo a mi alrededor se derrumbó. Me sentía mal, había echado a perder las cosas dos veces y no sabía si volvería a verlo. Genial. Eta ves sí hubiera deseado que fuera un sueño y despertar ya de él.
Al mediodía, luego de haber terminado el turno de la mañana en el trabajo, le dije a Alberto que me sentía mal y que no vendría a la tarde como de costumbre. No pudo decirme nada, ya que nunca acostumbraba a faltar, así que me encaminé lo más rápido que pude a mi departamento donde me la pasé dando pequeñas vueltas dentro de el todo el día.
Eran las nueve y media pasadas de la noche y habían tocado a mi puerta que, aún sin ganas, me decidí a abrirla. Al hacerlo quedé estupefacta.
_ Acaso eso es un muérdago? - me dijo Johnny rápidamente señalándome la pequeña planta que se encontraba por arriba de nuestras cabezas. Yo sonreí al verlo fruncir el seño y la manera en que este lo dijo.
_ Sí - dije con una suave risa - Te encuentras bien?
_ La verdad, no. Qué necesidad hay de que aparezca un muérdago en mi camino?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por leer...

Gracias por leer...
Gracias a todas las que toman su tiempo y leen estas historias, de todo corazón. Y a las que colaboran para que este blog siga a flote. Por favor, deja un comentario :)