Mi profesor ♥ |
_ Bueno, aquí todas ríen – contestó Rose fingiendo seriedad.
_ Quieres irte afuera de una vez?
_ Afuera? – preguntó la muchacha en tono inocente – No, es que hace frío.
_ Retírate de una vez! – gritó la coordinadora – Te pones a limpiar cada rincón del patio en este momento! – ordenó.
_ Supongo que me pagarán por eso porque de lo contrario se llamaría explotación.
_ No te quieras pasar de graciosa, Polo – dijo entre dientes la mujer cuyo rostro empezaba a sofocarse por el calor de la rabia – Espera – exclamó cuando la muchacha dio media vuelta para caminar hasta la puerta – Aún no he terminado.
_ Aún hay más? – preguntó Rose en tono burlón.
_ Le llevas esto al director a ver si eres tan valiente – respondió mientras Rose recibía el papel con una sonrisa – Ahora largo de aquí – añadió señalando la puerta.
_ Que quede bien limpio – susurró Diana antes de que Rose saliera del salón. A pesar de escucharla la muchacha ni se inmutó, prefirió ignorarla en lugar de buscarse más problemas.
_ Qué hiciste ahora niña? – preguntó el jardinero de la escuela al ver cruzar con una escoba y recogedor a Rose – Es el primer día de clases, no quieres llegar a terminar el año no?
_ Aquí no tienen sentido de humor – se quejó Rose empezando a reír con el hombre. La muchacha tardó lo suficiente como para no entrar a las dos primeras clases del día. Terminadas las labores y haciendo gala de su atrevimiento, enrumbó hacia la dirección donde esperó sentada luego de que la secretaria le dijo que el director se encontraba en una reunión. Presa del aburrimiento cruzó las piernas en el momento en que la anciana secretaria abandonaba por un momento su puesto; tomó el papel para observarlo una vez más y sonreír en silencio.
_ Buenos días – saludó cortésmente un hombre con casaca de cuero, gorra tejida y mirada penetrante – Es esta la oficina del director?
_ Sí – contestó Rose observándolo fijamente luego de que él sonriera en agradecimiento. Había algo en aquel hombre que le resultaba familiar – Pero tendrá que esperar porque yo vine primero – añadió la muchacha dejando a un lado su dibujo mientras se paraba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario